6 señales que revelan si necesitas gafas progresivas
Tengo más de 40 años: ¿Cómo saber si necesito gafas progresivas?
¿Tienes más de cuarenta años y estás empezando a sentir molestias en tu vista?
En España, el 67% de los mayores de 45 años padece de vista cansada o presbicia, un defecto visual asociado a la edad que consiste en la pérdida de elasticidad del cristalino del ojo, órgano encargado de enfocar a distintas distancias.
La decisión de si debes o no usar gafas progresivas puede estar más cerca de lo que crees y es conveniente estar bien informado sobre este tema. Si quieres aprender a identificar si necesitas gafas progresivas, ten en cuenta las siguientes señales:
1. Ves borroso de cerca
La primera señal de que necesitas gafas para la presbicia es la visión borrosa de cerca. Por ejemplo, letras borrosas mientras lees o en actividades como enhebrar una aguja o cocinar.
2. Estiras el brazo para leer
Debido a que la visión en cerca se ve afectada, empiezas a estirar cada vez más el brazo para separarte de lo que estás leyendo. Por eso a la presbicia también se le conoce como el síndrome del brazo largo.
3. Necesitas más luz que antes para ver bien
Antes con la luz general de la habitación te bastaba, ahora sientes que debes iluminar mejor el área de trabajo o la zona de lectura. Otra señal para tener en cuenta.
4. Estás teniendo dolores de cabeza
La fatiga visual ocasionada por la incapacidad de enfocar bien provoca dolores de cabeza. Sucede que muchos no atribuyen el dolor de cabeza a problemas visuales y pasan este síntoma por alto. ¡Que no te pase a ti!.
5. Entrecierras los ojos a menudo para ver mejor
Cuando entrecerramos lo ojos, incluso cuando no padecemos de ninguna enfermedad visual, vemos mejor. Esto se debe a que los músculos de las mejillas y cejas bloquean parte de la luz que entra a los ojos permitiendo una visión más nítida. Como ya no puedes enfocar bien, recurres a estas soluciones temporales, pero puede ser una señal de que necesitas gafas.
6. Fatiga Visual
La fatiga visual también provoca ardor y ojos enrojecidos. Esto se debe a que sobreesforzamos los músculos de los ojos para poder ver bien la letra pequeña provocando esta sensación de fatiga visual. Si estás experimentando todos estos síntomas las probabilidades de que necesites usar gafas son altas. Pero ten presente que solo un óptico profesional o un oftalmólogo podrá decirte con certeza si las necesitas o no.
Si es así, el siguiente paso es identificar qué tipo de lentes debes usar. Hay una gran variedad de soluciones en el mercado: desde lentillas, gafas de lectura, bifocales hasta gafas progresivas- ¡que son nuestra especialidad! Las gafas progresivas son ideales para ver bien en todas las distancias: es como tener varias gafas en una.
Pero antes de entrar en detalle, asegúrate de detectar a qué se deben los malestares que estás presentando. Desde nuestra web puedes reservar una cita sin compromiso con tu óptica gafas.es más cercana, para que te evalúen la vista: